Una vez que se decidió el proyecto a realizar, lo primero fue tener el registro de las fotografías con las que iba a trabajar.  Se desarrollaron varias series de fotografías, tomándolo a la vez como una forma de estudio del "modo belleza", lo cual permitió identificar los elementos principales que este modifica en el rostro.  Tras esto concluí que los cambios estaban en la estilización del rostro, el cual adelgaza. Lo mismo ocurre con la nariz.  La piel se ve disminuida en sus detalles, generando planitud.  Además, los ojos se vuelven más grandes. Y por último, se realza el contraste de luz provocando que el rostro se vea más claro de lo que es. 

 

La selección de fotos final, en orden de izquierda a derecha, se encuentra la primera con el "modo belleza" desactivado, la segunda con el modo en nivel 2 y la tercera  con el nivel 7, es decir, al máximo.

 


 

Teniendo las imágenes como referencia, realicé los dibujos en un formato de 35 x 45 cm sobre papel Tiziano de 160 gr.  Antes de comenzar a dibujar, seleccioné los colores que podría utilizar y obtuve las siguientes paletas de colores, correspondientes al rostro, los ojos y el pelo.

 

 



El proceso de dibujo fue simultáneo entre los tres retratos, ya que necesitaba tener una imagen previa de la transformación que iba sucediendo entre ellos. Además, me permitió seguir la continuidad en cuanto a los colores.